.Cursos

LITERATURA EN INGLÉS Y EN ESPAÑOL 2010

Course 1: Literature in English. WEDNESDAY 10.30 – 12.00 or 19.00 – 20.30

1. Literature in English: The Return of the Classics.

This year’s course includes a selection of XIXth and XXth Century classics, narrators and dramatists, English, Irish and American.

We begin with two plays by English playwright Peter Schaffer, the harrowingEquus and the livelier but at times no less somberAmadeus, where the dull and blurry Salieri of history became the vivid and unforgettable Salieri of fiction and myth. In both cases we will also be viewing parts of the movies (Equus with Richard Burton;Amadeus in the well known version directed by Milos Forman).

May will be dedicated to one of the greatest dramatists of the Twentieth Century, Irish born author Samuel Beckett. We will read his well knownWaiting for Godot, the equally influentialEndgame (a post-apocalyptic play that many see as Beckett’s version ofKing Lear) and the brilliantKrapp’s Last Tape, where a single actor and a tape re-corder are enough to bring to us all the miseries of failure and ageing, hopes and defeat, and the unbridgeable distance between the different persons we come to be in the course of our life. In all three cases we will be viewing film versions from the monumental English-Irish projectBeckett on Film (19 films x 19 directors).

July will be dedicated to the short stories of Ernest Hemingway, including such classics as “The Snows of Kilimanjaro”, “The Short Happy Life of Francis Macomber” and those belonging to the Nick Adams series, in which the author traces the course of a man’s life from childhood through maturity in stories written as he himself developed and changed.

Light in August by William Faulkner is one of those novels that can change a reader forever. In my case, I felt my mind literally enlarging – with awe – in order to accom-modate what was going on in the pages of ‘that book’. The author found in the figure of the ‘white nigger’ (a man white in outward appearance but ‘legally black’) an emblem-atic figure to condense the violent antinomies of the history of the American South.

Nathaniel Hawthorne is the first great writer of American Letters. Admired and revered by such contemporaries as E.A. Poe, Herman Melville and Ralph Waldo Emerson, his novelThe Scarlet Letter is the first great classic of American Letters, both North and South. Set in the Puritan colonies of the 17th Century, the story of a woman forced to wear the letter “A” in scarlet on her clothing as a sign of her Adultery prefigures other forms of fanaticism and discrimination which, far from disappearing, are on the rise today.

Arthur Miller wrote his own parable of fanaticism as a criticism of the ‘witch hunts’ of the McCarthy era, and set it in Hawthorne’s Salem (one of the judges in the famous trial was Judge Hathorne, his ancestor and a character in Miller’s play.). We will also see parts of the film version with Daniel Day-Lewis and Winona Ryder.

John Cheever was also a descendant of the Puritans that shaped the soul of the U.S., and his tales, dealing mainly with life in the commuting suburbs of the 50s, are models of the short story form. The most famous, “The Swimmer”, is the story of a man who wants to swim across the suburbs joining all the swimming pools from his distant neighbors’ to his own; and is, at the same time, likeJoyce’s Ulysses, a recreation of Homer’sOdyssey.

J.D. Salinger wrote theCatcher in the Rye, became famous, wrote and published three other books and stopped publishing – but not writing, we are told – until his recent death. HisNine stories rank with Joyce’s, Scott Fitzgerald’s, Hemingway’s, Cheever´s and Carver’s as the best written in the English language in the XXth Century

Course 2: Shakespeare and Company. MONDAY 19.00 – 20.30

2. William Shakespeare.

“Nadie fue tantos hombres como aquel hombre, que a semejanza del egipcio Proteo pudo agotar todas las apariencias del ser” famosamente escribió sobre él Jorge Luis Borges en suEverything and Nothing. Lo cierto es que la trascendencia de la obra de William Shakespeare excede el campo de lo específicamente literario o teatral, convir-tiéndolo en algo así como el inventor de la condición humana, como sugiere el crítico estadounidense Harold Bloom en suShakespeare: la invención de lo humano.

Este año lo dedicaremos a las obras con nombre de rey: dos tragedias(Rey Lear y Mac-beth), varios dramas históricos(Enrique IV, Enrique V, Enrique VI) y dos obras que oscilan entre la tragedia y la historia(Ricardo II y Ricardo III).

Rey Lear y Macbeth, estimo, no necesitan presentación.Enrique IV es considerada por muchos críticos, sobre todo angloparlantes, la cumbre del arte de Shakespeare, como que en sus dos partes creó la figura inmortal de Falstaff y al no menos fascinante príncipe rebelde Hal, que luego se convertirá en el ejemplar Enrique V. Pero la obra de este nombre abunda en feroces ambigüedades, pues ya presenta al protagonista como modelo de realeza o como un político inescrupuloso e hipócrita.

En la figura de Ricardo II, el rey hedonista y poeta tan admirado por Oscar Wilde, Sha-kespeare analiza, entre otras cosas, la frecuente confusión entre estoicismo y masoquis-mo, y planeta una pregunta que no ha perdido su actualidad: ¿Es mejor un gobernante legítimo pero inepto, o uno ilegítimo que gobierna bien? Así, esta obra se mueve entre la confianza medieval en el derecho divino de los reyes, por un lado, y las nuevas ideas de Maquiavelo sobre la primacía de la razón de estado y el necesario divorcio entre política y moral.

Shakespeare, como haría Wagner muchos años después, pensó algunas de sus obras como unidades autocontenidas y a la vez como parte de ciclos más vastos: Ricardo II, las dos partes deEnrique IV yEnrique V conforman una tetralogía sobre los orígenes de la Guerra de las Dos Rosas; y a esta tetralogía sigue – en el orden de la historia – otra que comprende las tres partes deEnrique VI yRicardo III.

Shakespeare había comenzado su larga saga sobre la historia inglesa en su juventud, con las tres partes deEnrique VI, en algunas de las cuales muchos ven la mano de otros au-tores, y por eso las dos primeras no están a la altura de las demás. Pero en la tercera parte hace su aparición impetuosa el carismático Ricardo III, y a partir de allí su autor y él se quedan con todo. Con Ricardo III, el rey que encarna los principios de Maquiavelo – que también es el diablo – la Guerra de las Dos Rosas llegó a su culminación, y con la nueva dinastía de los Tudor se inició un período de paz y prosperidad – al menos eso le enseñaban as obras de Shakespeare a su público, porque el teatro de aquella época cum-plía as funciones educativas o proselitistas que hoy se reparten entre la escuela, los dia-rios, el cine y la televisión.

Para la lectura en inglés se recomienda las ediciones New Cambridge (no las de Cam-bridge School , salvo que no haya remedio), New Swan, Oxford, o (para los más erudi-tos) las de Arden.

Curso 3: El Ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha. MARTES 1900-2030 o VIERNES 1030-1200.

3. Don Quijote de la Mancha.

¿Qué más, además de los molinos de viento? ElQuijote es la primera novela propia-mente dicha de toda la literatura, y para muchos, también, todavía hoy sigue siendo la mejor. Es, además, el gran monumento literario del Barroco, con juegos de espejos y entrecruzamiento de planos de realidad y ficción, tan complejos como los del cuadrLas Meninas de Velázquez. El cura y el barbero, por ejemplo, encuentran en la biblioteca de don Quijote un libro de Cervantes; y los personajes discuten los méritos literarios de su autor. El autor interrumpe una aventura con la espada del Vizcaíno a punto de caer sobre la cabeza de don Quijote (anticipándose en cuatrocientos años a la tecla ‘pause’ del video) porque se ha perdido el resto del manuscrito que decía estar leyendo, y debe-remos esperar a que lo encuentre para saber si la espada cae o no. La primera parte delQuijote fue tan popular en la España de su tiempo que un oportunista llamado Avellaneda escribió la segunda parte antes de que el propio Cervantes pudiera hacerlo: uno de los pocos casos conocidos en los que el plagio ha precedido al original. Irritado por esta circunstancia, don Quijote viaja a Barcelona para probar que lo que se dice de él en el‘Quijote de Avellaneda’ es falso. Cuando un personaje delQuijote de Avellaneda aprece en elQuijote de Cervantes, los personajes de Cervantes lo convencen de que es un personaje falso y le hacen firmar un documento al respecto. Los personajes de la segunda parte, además, han leído la primera: Sancho informa a don Quijote que «andaba ya en libros la historia de vuestra merced», y el bachiller Sansón Carrasco nos da incluso el detalle de la cantidad de ejemplares impresos. Los caballeros andantes de la primera parte existen sólo en la imaginación de don Quijote, pero en la segunda parte los prosai-cos contemporáneos, encantados con la lectura de aquélla, se deciden a revivir la caba-llería andante con el único propósito de burlarse del héroe, que ve así probadas todas sus fantasías. La conclusión es evidente. Antes que Joyce, antes que Pirandello, antes que Nabokov, antes que Borges, Cervantes ya lo había hecho, y bien.

El curso sobre elQuijote tendrá una duración de siete meses, e incluirá, además de una lectura comentada de las casi 1200 páginas de la novela, referencias a la historia, el arte y la sociedad de la España de tiempos de Cervantes. También veremos en video frag-mentos de versiones cinematográficas y de televisión, incluyendo una reciente miniserie de la TV española, con guión de Camilo José Cela y Fernando Rey interpretando al pro-tagonista. La edición que usaremos es la publicada por Alfaguara con motivo del IV centenario.

Empezamos en abril. Hagan su reserva con tiempo, pues los grupos ya se están llenando.